30/8/10

Globos:

Un niño negro contemplaba extasiado al vendedor de globos en la feria del pueblo. El pueblo era pequeño y el vendedor había llegado pocos días atrás, por lo tanto no era una persona conocida....




En pocos días la gente se dio cuenta de que era un excelente vendedor ya que usaba una técnica muy singular que lograba captar la atención de niños y grandes. En un momento soltó un globo rojo y toda la gente, especialmente los potenciales, pequeños clientes, miraron como el globo remontaba vuelo hacia el cielo.



Luego soltó un globo azul, después uno verde, después uno amarillo, uno blanco...



Todos ellos remontaron vuelo al igual que el globo rojo...



El niño negro, sin embargo, miraba fijamente sin desviar su atención, un globo negro que aún sostenía el vendedor en su mano.



Finalmente decidió acercarse y le preguntó al vendedor: Señor, si soltara usted el globo negro. ¿Subiría tan alto como los demás?



El vendedor sonrió comprensivamente al niño, soltó el cordel con que tenía sujeto el globo negro y, mientras éste se elevaba hacia lo alto, dijo: No es el color lo que hace subir, hijo. Es lo que hay adentro.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bonita historia. Realmente bonita y sencilla para que los niños comprendan lo que realmente importa en una persona.

Susana Terrados dijo...

Relinda historia, me encanta!!1 Con permiso la tengo que anotar en mi recuerdo para compartirla porque me parece un excelente ejemplo de vida.
Gracias Lucía. Besotes.

Juan dijo...

¡¡¡Que bueno!!!

Se me han erizado los poros de los brazos, y he sentido un escalofrío que me ha subido desde el estómago hasta la garganta formando una especie de nudo que me ha forzado a llorar para recuperar la respiración.

Si el relato es fruto de tu imaginación, te admiro por ello. Y si no fuese así, te admiro por mostrarmelo.

Besotes y hasta pronto.

Adelaida dijo...

Solo te puedo decir "PRECIOSA HISTORA"
Besos Adelaida

Anónimo dijo...

Hola Lucía,buen post pásate por mi blog te he dejado algo que mereces.

Eschinefa dijo...

Hermoso relato.


Saludo con una mano,
saludo con las dos.
Saludo con la cabeza
y ahora te toca a vos.

Mi Rincón Virtual dijo...

Precioso el post y genial para que los niños aprendan desde pequeños estos valores que son tan importantes,
un abrazo,

Mi Rincón Virtual